29/12/2022
Alguien me dijo, “no importa bajo qué sistema vivas, pero si todo el mundo trata de obrar de la manera correcta, todo funcionará bien”.
Yo le dije: “Creo que te equivocas. Sí importa.”
Si la gente quisiera evitar fumar, por ejemplo, ¿bastaría con su decisión de obrar, con su voluntad? ¿Irían a los sitios cerrados en los que todo el mundo fuma? ¿Tendrían por amigos a muchos fumadores? En primer lugar, te digo: ya estarían fumando, al respirar el ambiente viciado. En segundo lugar, ¿para qué tentar al diablo? Aunque uno quisiera obrar bien (no fumar), no lo lograría. Tu voluntad puede ser muy fuerte, pero nunca debemos menospreciar al enemigo.
Igual sucede con el sistema socioeconómico en que vivimos, que hace el “ambiente”. Si vivimos en un ambiente egoísta, materialista, tendremos esa espada de Damocles siempre pendiendo sobre nuestra cabeza. Un “sistema de pecado”, como ha catalogado la propia Iglesia Católica al capitalismo (al menos por escrito), será una influencia muy mala, que hará más difícil la labor de quienes quieran actuar bien.
Pero no sólo la hará más difícil. Será como luchar contra la corriente. Un empresario que desease pagar salarios justos, sería devorado por los competidores. Por ejemplo, en este ambiente capitalista, si eres un emprendedor, y tienes un empleado, el sistema te obliga a pagarle el salario mínimo, para hacer rentable tu actividad. Y el precio de venta te será impuesto, hasta buena medida, por el “mercado”, que sigue siendo capitalista.
Recuerdo al buen Peter “Muebles”, Peter Litvin, en Guatire, hace unas décadas, quien, a sus expensas, dirigió el tránsito en la carretera Guatire – Caucagua, colocando anuncios, y regulando él mismo, con su camioncito, la velocidad máxima. Salvó muchas vidas. El Ministerio de Transporte lo perseguía, porque usaba sus propias señales de tránsito, muy diferentes a las oficiales.
Peter era capaz de levantar una fábrica en una semana. Su poder de convencimiento era muy grande, conseguía quien le prestase un galpón por un mes, un empresario que tuviese máquinas paradas, que se las alquilase con pago a futuro, y así, en una semana, comenzaba a producir. Así hizo con la fábrica de camas de pino “Peter Muebles”, las más económicas y seguras de la zona.
Pero además de eso, trataba excelentemente bien a sus empleados. Una vez establecido, a los caporales les daba un vehículo. Cada semana se rotaba en las casas de sus obreros para construirles o mejorarles sus casas. Los sueldos eran los mejores. Una pequeña isla de socialismo en un mar de capitalismo.
Un día encontró a un obrero fumando dentro de la fábrica. “Chico, ¿no ves el peligro de causar un incendio? ¿No ves que esto es de todos?”
Y el obrero le respondió: “Bueno, si quieres bótame”. No entendía nada de lo que ahí estaba sucediendo. Ese socialismo que intentó implantar Peter no tenía cabida en un capitalismo que reinaba en la cabeza del obrero y de todo el mundo alrededor.
El “mercado” y la falta de conciencia de la mayoría se comió al experimento de Peter. Veamos por qué:
Todo proceso social tiene aspectos externos, visibles, así como también aspectos internos, no tangibles. Y, a la vez, tiene aspectos individuales, como también colectivos. Los cuatro aspectos deben ser tratados en forma simultánea, holística. Son cuatro aspectos (según Ken Wilber):
Lo externo colectivo: las instituciones sociales, las leyes, la infraestructura.
Lo colectivo, pero intangible, la cultura, la visión de mundo, la ideología.
Lo interno intangible, la conciencia humana.
Lo interno tangible: el cuerpo humano, la salud, sus bienes materiales, etc.
Así que pretender lograr una sociedad justa, equitativa, pacífica, en un ambiente que no vaya en esa dirección, es inútil.
Por eso decimos que la Revolución es una, pero tiene tres caras: la interna (ética, espiritual), la social (familiar, comunitaria, nacional) y mundial: la Constitución Mundial para la Federación de la Tierra (https://constitucionmundial.com/).
Sí señor, la revolución es mundial, o no lo es.
Y, al mismo tiempo, la Revolución es en los cuatro aspectos.
Así que sí importa.
Yes, it does matter
leopoldocook@gmail.com
12/29/2022
Someone told me, "It doesn't matter what system you live under, but if everyone tries to do the right thing, everything will work out fine."
I told him: “I think you are wrong. Of course it does matter."
If people wanted to avoid smoking, for example, would their decision to act, their will, suffice? Would they go to the closed places where everyone smokes? Would they have many smokers as friends? First of all, I tell you: they would already be smoking, breathing the stale atmosphere. Second, why tempt the devil? Even if you wanted to do well (not smoke), you would not succeed. Your will may be very strong, but you must never underestimate the enemy.
The same happens with the socioeconomic system in which we live, which makes the "environment". If we live in a selfish, materialistic environment, we will have that sword of Damocles always hanging over our head. A “system of sin”, as the Catholic Church itself has cataloged capitalism (at least in writing), will be a very bad influence, which will make the work of those who want to act well more difficult.
But it will not only make it more difficult. It will be like fighting against the current. An employer who wanted to pay fair wages would be eaten up by competitors. For example, in this capitalist environment, if you are an entrepreneur, and you have an employee, the system forces you to pay him the minimum wage, to make your activity profitable. And the sale price will be imposed on you, to a large extent, by the "market", which is still capitalist.
I remember good “Peter Muebles" (Furniture), Peter Litvin, in Guatire, a few decades ago, who, at his expense, directed the traffic on the Guatire - Caucagua road, placing signs, and regulating the maximum speed himself, with his little truck. He saved many lives. The Ministry of Transport was persecuting him, because he used his own traffic signals, very different from the official ones.
Peter was capable of building a factory in a week. His power of persuasion was very great, he would get someone to lend him a shed for a month, a businessman who had stopped machines, who would rent them out with future payment, and thus, in a week, he would start producing. This is what he did with the “Peter Muebles” pine bed factory, the most economical and safest in the area.
But besides that, he treated his employees extremely well. Once established, he gave the foremen a vehicle. Every week he rotated to the houses of his workers to build or improve their houses. Salaries were the best. A small island of socialism in a sea of capitalism.
One day he found a worker smoking inside the factory. “Boy, don't you see the danger of starting a fire? Don't you see that this belongs to everyone?
And the worker replied: "Well, if you want, throw me out." He did not understand anything of what was happening there. That socialism that Peter tried to implant had no place in a capitalism that reigned in the head of the worker and of the entire world around him.
The "market" and the lack of awareness of the majority ate Peter's experiment. Let's see why:
Every social process has external, visible aspects, as well as internal, intangible aspects. And, at the same time, it has individual aspects, as well as collective ones. The four aspects must be treated simultaneously, holistically. There are four aspects (as say Ken Wilber):
The collective external: social institutions, laws, infrastructure.
The collective, but intangible, culture, worldview, ideology.
The intangible internal, human consciousness.
The tangible internal: the human body, health, its material goods, etc.
So trying to achieve a just, equitable, peaceful society, in an environment that does not go in that direction, is useless.
That is why we say that the Revolution is one, but it has three faces: internal (ethical, spiritual), social (family, community, national) and global: the Constitution for the Federation of the earth (www.earthconstitution.world).
Yes, sir, the revolution is worldwide, or it is not.
And, at the same time, the Revolution is in all four aspects.
So, it does matter.