Leopoldo Alberto Cook Antonorsi
Vicepresidente para América Latina y el Caribe
10/01/2023
Todos tenemos derecho a un ingreso y una calidad de vida dignos. Los ingresos de los trabajadores deben ser indexados al costo de los productos de primera necesidad. Pero eso no es suficiente.
La Constitución Mundial, en su artículo 1, contempla las funciones generales del gobierno mundial democrático federado. Entre ellas, muy importantes, “proteger los derechos humanos fundamentales, incluyendo la vida, la libertad, la seguridad, la democracia y las oportunidades iguales de vida”. Así mismo, “obtener para todos los pueblos de la Tierra, las condiciones requeridas para el desarrollo económico y social equitativo y para disminuir las diferencias sociales.”
En la Ley Mundial 22 se establecen las bases de un nuevo sistema económico y financiero mundial. Se sustituye el nefasto Producto Interno Bruto (PIB) por el Producto Económico Bruto (PEB), que sólo incluye lo que agrega valor a la sociedad, y se calculará cada año. Así mismo, cada año se calculará el número de horas trabajadas a nivel mundial y el salario promedio al dividir ambas, por lo que los ingresos quedarán indexados a la productividad. La Moneda de la Tierra se correlaciona con las horas trabajadas y la productividad. El gobierno proporcionará a todos los ciudadanos educación, atención médica, agua, saneamiento y seguridad social gratuitos y adecuados. Mas que ingresos, se propicia la calidad de vida. Se calculará el salario mínimo anualmente para garantizar las necesidades básicas. Se establece igual salario para igual trabajo. Se calcula anualmente el "trabajo a tiempo completo", que es el promedio de horas trabajadas por trabajador por semana para producir el PEB menos la tasa de desempleo porcentual dentro de la Federación de la Tierra, de modo de causar una tendencia al pleno empleo. El límite legal más alto de ingresos personales es no más de cuatro veces el del salario mínimo. Cualquier ingreso adicional será pagado en forma de impuestos, como inversión para el negocio, o donado.
Con la Ley Mundial 42 se crea un ingreso anual garantizado para todos los ciudadanos de la Federación de la Tierra. Mide el ingreso anual garantizado (GAI) en moneda terrestre. Especifica criterios para calcular un ingreso mínimo que cubra las necesidades básicas. Garantiza procedimientos rápidos y confiables para solicitar asistencia complementaria al GAI. Da derecho a las personas con ingresos intermedios a una proporción de la asistencia por derecho de GAI. Define la relación entre los ingresos totales de una persona y el derecho a recibir pagos de GAI. Garantiza los pagos de GAI en caso de pérdida del empleo, enfermedad u otras calamidades.
Por su parte, la Ley 51 aprueba la Ley de Prosperidad Económica, que deroga la creación privada de crédito para fines de especulación. Se promueve los bienes y servicios sostenibles y productivos. La banca se declara como un servicio público, será fundamentalmente pública, aunque la banca privada podrá seguir funcionando localmente. Se desincentiva la deuda pública. Los préstamos serán a muy bajo interés. Se promueve la economía local y regional, y la creación de empleos. No habrá más rescate de empresas quebradas. El sistema financiero creará medios de comunicación para la educación. Se democratizará y se hará sustentable la tecnología.
En resumen, respecto a las finanzas y la economía, en la Constitución Mundial se contempla nuevas instituciones financieras. Un Banco Central sin encaje, moneda mundial asociada al trabajo. Regulación del mercado. Control, nacionalización o mundialización de las transnacionales. Ingresos personales mínimos y máximos (relación de 1 a 4). Créditos sin retorno para emprendedores. Disminución progresiva del desempleo. Ingreso anual garantizado. La calidad de vida será más importante que simplemente un alto ingreso, pues se trata de calidad, no de cantidad. Acceso gratuito a la educación, a la cultura, a la tecnología abierta, al alcance de todos.
Todo esto está vigente, y comenzará aplicarse con fuerza en la Primera Etapa Operativa, una vez que la Constitución Mundial haya sido ratificada por al menos veinticinco naciones, o cien distritos electorales, o una combinación de ambos.
Mientras tanto, mientras se promueve la Constitución Mundial, apoyamos firmemente la aplicación de estos principios para todos los pueblos. Sabemos que la ONU es incapaz de hacerlo, ya que no es gobierno, tan sólo un acuerdo para mantener el sistema mundial injusto imperante.
Por eso, instamos a las naciones a garantizar el ingreso justo y la calidad de vida digna y suficiente para todos sus habitantes. Y a pueblo y naciones a ratificar la Constitución Mundial lo antes posible.
No basta con un ingreso digno. Se requiere un nuevo sistema económico y financiero mundial.