El administrador de la NASA, Bill Nelson, sugirió este domingo que Pekín podría reclamar ciertos territorios lunares.
Pero se equivocan. La Constitución Mundial para la Federación de la Tierra (artículo 16) establece claramente que la Luna es un “Territorio Mundial” y pertenece a “todas las gentes de la Tierra”. Por tanto, es administrada por el Parlamento Mundial e implementada por el Ejecutivo Mundial.